El laboratorio de sobretensiones y rayos, una herramienta de innovación y excelencia
Desde su establecimiento hace más de 25 años, el laboratorio de alta tensión de...
Protección de instalaciones de recarga para vehículos eléctricos
Las instalaciones de recarga de vehículo eléctrico son instalaciones que están expuestas a sobretensiones transitorias y permanentes. Estas instalaciones requieren fundamentalmente de continuidad de servicio para mantener el coche siempre cargado. Además, podemos encontrarlas en distintas ubicaciones, siendo las de recarga en puntos urbanos, las más expuestas a sobretensiones.
La vulnerabilidad de la electrónica del cargador frente a sobretensiones ha requerido la especificación de su protección de manera obligatoria, como sucede en España bajo la ITC-BT-52 publicada en el REBT.
Protegemos la movilidad eléctrica por un futuro más sostenible
Seguridad instalación y vehículo eléctrico
Minimiza el riesgo de que tanto la instalación de recarga como el vehículo eléctrico sufran daños.
Continuidad de servicio de recarga
Garantiza el suministro de energía y evita posibles fallas en la infraestructura de recarga.
Ahorro de costes mantenimiento
Evita el desgaste prematuro y la destrucción de equipos, se reducen los gastos de reparación y reemplazo y se optimiza la vida útil de la infraestructura de recarga.
Eficiencia energética y consumo
Maximiza el rendimiento y optimiza el proceso de carga, promoviendo la sostenibilidad en la movilidad eléctrica.
¿Por qué proteger contra sobretensiones una instalación de recarga del vehículo eléctrico?
Las sobretensiones pueden suponer un impacto en la vida útil de los cargadores pudiendo llevarlos a un final de vida prematuro. Hay cargadores que pueden implementar una protección propia para su electrónica, pero está será en muchos casos insuficiente frente a sobretensiones, además de estar situadas con un acceso muy difícil, imposibilitando la sustitución si esta llegase a final de vida.
El coste de reemplazar un cargador de VE es elevado, pero también es importante entender que la sobretensión nos puede dejar sin continuidad de carga y, por tanto, con nuestro vehículo eléctrico sin carga disponible para ser utilizado.
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