La impedancia infinita es una funcionalidad específica que debe garantizarse en los puntos de recarga de vehículo eléctrico en instalaciones realizadas según el Esquema 2 de la ITC-BT-52.
Su objetivo principal es garantizar que, en caso de actuación de la función de control de potencia del contador, el reset del contador se realice desde la vivienda, cumpliendo los requisitos de la ITC-BT-52, sin necesidad de desplazarse al punto de carga.
Esquema 2 ITC-BT-52: contexto eléctrico de aplicación
En el Esquema 2, el punto de recarga y la instalación interior de la vivienda comparten el mismo contrato de suministro y están asociados al mismo equipo de medida (contador).
Este esquema también se conoce como “doble borna”, porque tanto la instalación de la vivienda como el circuito que alimenta el punto de recarga se conectan aguas abajo del mismo dispositivo de control de potencia. En la práctica, esa función de ICP está hoy integrada en los contadores digitales.
Según la ITC-BT-52, si se produce una desconexión por sobreconsumo, el rearme debe realizarse desde el interior de la vivienda, actuando sobre el cuadro eléctrico, sin necesidad de desplazarse a la centralización de contadores o al punto de recarga.
Definición funcional de la impedancia infinita
Un dispositivo con tecnología de impedancia infinita, como seria el EV-CHECK REC, está diseñado para que, durante el proceso de rearme del contador:
- Se desacople eléctricamente del circuito de medida del contador.
- Presente una impedancia muy elevada (corriente prácticamente nula) en el punto de medida.
- Sea, a efectos de la función de control de potencia del contador, “invisible” como carga en el instante de verificación previa al restablecimiento del suministro.
Desde el punto de vista funcional, la impedancia infinita se traduce en una auto-desconexión temporal del equipo de recarga durante el ciclo de rearme, revirtiendo posteriormente a su estado normal de operación una vez estabilizada la tensión de la red.
Ventaja técnica frente a soluciones convencionales
Tradicionalmente, otras soluciones contempladas en la ITC-BT-52 para el Esquema 2 se basan en métodos de rearme que requieren uno o dos conductores de mando entre la vivienda y el contador, lo que implica cableados adicionales, mayor complejidad de instalación y un incremento del coste global.
Al incorporar la tecnología de impedancia infinita directamente en el punto de recarga, se consigue que el rearme de la instalación tras un corte por sobreconsumo se pueda realizar simplemente bajando y subiendo el interruptor general de la vivienda. Esto simplifica la instalación y reduce el coste para el usuario.
Proceso paso a paso de actuación de la impedancia infinita
Paso 1: El disparo por sobreconsumo
- Situación: El consumo eléctrico combinado de la vivienda y del vehículo eléctrico supera la potencia contratada.
- Acción del contador: El contador inteligente detecta el exceso de potencia y, para proteger la red y el contrato, activa la función de control de potencia, interrumpiendo el suministro eléctrico a la vivienda y al punto de recarga de vehículo eléctrico.
Paso 1: Se supera la potencia contratada y el contador corta el suministro.
Paso 2: La desconexión del suministro
- Reacción del punto de recarga: El punto de recarga con tecnología de impedancia infinita, al detectar la ausencia total de tensión o una caída de tensión significativa, activa inmediatamente su mecanismo interno de «invisibilidad».
- Impedancia infinita activa: El dispositivo se desconecta internamente del circuito de medida del contador, presentando una impedancia extremadamente alta o, lo que es lo mismo, un consumo de corriente de cero al punto donde el contador realiza la medición para el rearme.
Paso 2: El protector detecta la caída de tensión y se vuelve invisible activando la impedancia infinita.
Paso 3: El rearme por parte del usuario
- Acción requerida: Para restablecer el suministro, el usuario acude al Interruptor General Automático (IGA) de su cuadro eléctrico dentro de la vivienda.
- Secuencia de rearme: El usuario baja y vuelve a subir el IGA, invisibilizando por un instante el circuito de la vivienda. En ese momento, el contador inteligente revisa si hay cargas en la instalación antes de restablecer la alimentación. Gracias a la tecnología de impedancia infinita (activada en el paso 2), el punto de recarga no presenta ninguna carga detectable y, para el contador, únicamente aparecen las cargas de la vivienda (reducidas por el usuario o residuales). Si la carga medida es inferior al límite seguro que tiene especificado, el contador autoriza el restablecimiento de la energía.
Paso 3: El usuario baja y sube el IGA de la vivienda y, en ese transcurso, el contador comprueba las cargas y no detecta consumo.
Paso 4: Restablecimiento y retorno a la normalidad
- Suministro restablecido: El contador restablece el suministro eléctrico a la vivienda y al punto de recarga.
- Desactivación del mecanismo: Una vez que el punto de recarga detecta que la tensión se ha estabilizado, automáticamente desactiva la función de impedancia infinita y vuelve a su estado normal, listo para reanudar la carga del vehículo (si el vehículo lo solicita y la potencia total lo permite).
En esencia, la impedancia infinita es un mecanismo de auto-desconexión temporal del punto de recarga que se activa durante el periodo de rearme del contador, asegurando así que el contador restablezca la energía sin detectar una carga.
Paso 4: El suministro se restablece por parte del contador y el cargador vuelve a funcionar con normalidad.
Nuestras soluciones para Esquema 2
Nuestras EV boxes integran en ellas el EV-CHECK REC (protector contra sobretensiones) con la funcionalidad de impedancia infinita, ofreciendo una solución específica y optimizada para instalaciones bajo Esquema 2 de la ITC-BT-52.



